DANIEL ENTRIALGO
Concebido como un instructivo santoral del arte del hedonismo más destructivo, este compendio de crónicas exquisitas desgrana las noches de juerga y golferío de los más grandes campeones del exceso, auténticas estrellas estrelladas del deporte mundial. ¿Cómo dilapidó Mike Tyson una fortuna de 400 millones de dólares? ¿Estuvo George Best 22 días de borrachera tras marcar un gol histórico? ¿Por qué una canción de Pearl Jam evitó que Dennis Rodman se volase la cabeza? ¿Mató con sus propias manos Ty Cobb a un hombre que intentó apuñalarle? Mágico' González, John Daly, El Chava' Jiménez o Dum Dum' Pacheco son otras leyendas deportivas que apuraron sexo, drogas y mucho alcohol entre un puñado de tardes de gloria.
Romario declaró: El día del Palmeiras salí por la noche, llegué a las siete al hotel y luego marqué tres goles. Desde entonces no he vuelto a hacerlo y los goles no llegan, así que habrá que volver a salir por las noches, Quique Peinado.