DURAS, MARGUERITE
Una mujer dicta unas pocas frases al día a lo largo de su último añode vida. Están dirigidas a su amante, que no sólo las mecanografía,sino que también es el objeto de las pasiones tumultuosas que sedesprenden de ellas. Esa mujer es Marguerite Duras, una de lasescritoras francesas más importantes de todos los tiempos, quienfallece sólo tres días después de la última entrada de este libro.Si todas sus historias se desarrollan alrededor de una pérdida, enNada más Duras narra la pérdida definitiva: la pérdida de su propiavoz. Nada más es un grito desgarrador, una carta de amor fervorosa ydespechada a la vez, una meditación existencial y una confidencia enla que hallamos reminiscencias y destellos de su vida y obra, lo quehacen de él un texto tan hermético como fascinante.A fuerza de pronunciar palabras terminales, Duras consigue que unposible testamento literario se transforme en un testimonio de vida,en una afirmación de que cualquier epílogo supone, también, un cantode bienvenida, que toda posteridad se reconcilia, en el minutopostrero, con las singularidades de una vida.